miércoles, 11 de julio de 2012

Amanecí







Amanecí con la cabeza enmarañada de tus besos.
Con tu olor impregnado y colgando a jirones de mi pecho.
Y tu voz, en susurros arrullando mis silencios.
Me miraste.
Sonreíste.
Y continúe con mi sueño.